lunes, 17 de abril de 2017

Otras páginas  ya las he ido citando.
1.-Se echaba en el sofá junto a mí. Eso demuestra que a pesar de todo lo que digan era un animal social. Y se dormía horas y horas junto a mí buscando el contacto.  En otros momentos se iba a la cuna o al suelo buscando  el poder estirarse o la soledad. Yo siempre respetaba sus acciones. 
2.-Cuando estoy en el sofá,  como se ve en la foto se siente feliz y parece que  está escuchando lo que yo le leo y busca en todo momento que le acaricie  todo su cuerpo desde la cabecita  al lomo pasando por la barriguita.


Otras veces si está en celo se tumbaba en la mesa de cristal y con sus manos alcanzaba las nuestras para que la atusáramos y de forma reiterada y si no lo hacíamos ella insistía en que lo hiciéramos hasta llegar a aburrirnos  pues ella no se cansaba.

3.-Me miraba y me hablaba. Yo solía decir que  al igual que yo le hablaba y ella me entendía, esto sin ninguna duda, ella también me hablaba y muchas veces la entendía. Por ejemplo  muchas veces cuando la echaba la comida en su comedero normalmente limpio tenía que estar con ella pues  por el contrario ella  no comía, ya que quería  estar acompañada mientras comía. Yo comprendía cuando   necesitaba cariño. Cuando comíamos  la solíamos quedar en el pasillo para poder comer tranquilos pues si estaba con nosotros, unas veces se echaba en el suelo  mirándonos pero otras no.  Entonces al terminar la abría la puerta y la decía  vamos al sofá y ella salía corriendo y se sentaba en  el sofá en su rinconcito a los pies antes que yo  llegara. Pero mientras comíamos ella esperaba a la puerta todo el tiempo hasta que abríamos. Todavía después de casi tres meses cuando  me tumbo en el sofá después de comer le dejo el rinconcito donde ella se echaba a dormir siendo  para mí como un ritual.
 4.- Queriendo no me arañaba sino solo jugando y por esos tenía  muchos arañazos por todo el cuerpo e incluso jugando me mordía. Solo  alguna vez que se estresó si me arañó de verdad pero  en muy contadas ocasiones porque la cogía y no quería soltarla  para meterla en casa. Los araños me han curado  pero su ausencia no. Pues la pena por lo que se ve es más profunda y más difícil de curar.
5.-Lo normal en un felino es  no arrimarse a los extraños pero mi Maya quería saber  quién entraba  en casa y se acercaba  a ellos y por eso  mantengo la hipótesis que fue retenida contra su voluntad. Eso la hizo vulnerable pues otros no se dejan  acercar a los demás.
6.--Caminaba junto a mí y alguna vez la reñía porque  no podía caminar pues parecía que se liaba a los tobillos y alguna vez llegué a pisarle el rabiche o una patina. Era su forma de demostrarnos que era parte de nuestra vida.
7.-Aunque son independientes lo pasan mal si se les tiene en espacios  pequeños, como pasó en la guardería o se les deja solo .Por eso cuando estaba sola en casa aunque solo hubiera sido mientras salíamos a comprar al volver siempre estaba esperando a la  puerta. En el pueblo si la dejábamos en casa se subía a   las camas de arriba pero cuando volvíamos ella bajaba corriendo y estaba ahí detrás de la  puerta. Por eso en la guardería  se deprimió y no dejó de llorar aquellos tres días desde el día maldito en que la  llevé incluso cuando la llevaron a Aldeanueva me contó mi hijo que fue llorando todo el trayecto y por eso se escapó pues no quería estar encerrada ni sola y ni siquiera el otro gatito la retuvo allí. RECUERDO UN DÍA QUE  HABÍAMOS IDO DE VACACIONES Y SOLO LA VISITABAN UNA VEZ AL DÍA Y ERA POCO EL TIEMPO QUE PASABAN CON ELLA QUE AL SENTIRME EN EL PASILLO YA CUANDO ABRIERON LA PUERTA SALÍO CORRIENDO HACIA MI Y SE SUBIÓ A MIS BRAZOS PUES ESTABA  FALTA DE CARIÑO. También cuando estaba fuera  preguntaba por ella todos los días y le decía a mi hijo que la visitara  más de una vez al día y que pasara con ella algún rato dándole cariño y mimos y así lo hacía.

8.-La cara de la foto nos indica que estaba feliz, pues tenía los ojos abiertos y redondos o la otra con los ojos cerrados sintiéndose protegida.

Otras páginas  ya las he ido citando.
1.-Se echaba en el sofá junto a mí. Eso demuestra que a pesar de todo lo que digan era un animal social. Y se dormía horas y horas junto a mí buscando el contacto.  En otros momentos se iba a la cuna o al suelo buscando  el poder estirarse o la soledad. Yo siempre respetaba sus acciones. 
2.-Cuando estoy en el sofá,  como se ve en la foto se siente feliz y parece que  está escuchando lo que yo le leo y busca en todo momento que le acaricie  todo su cuerpo desde la cabecita  al lomo pasando por la barriguita.


Otras veces si está en celo se tumbaba en la mesa de cristal y con sus manos alcanzaba las nuestras para que la atusáramos y de forma reiterada y si no lo hacíamos ella insistía en que lo hiciéramos hasta llegar a aburrirnos  pues ella no se cansaba.

3.-Me miraba y me hablaba. Yo solía decir que  al igual que yo le hablaba y ella me entendía, esto sin ninguna duda, ella también me hablaba y muchas veces la entendía. Por ejemplo  muchas veces cuando la echaba la comida en su comedero normalmente limpio tenía que estar con ella pues  por el contrario ella  no comía, ya que quería  estar acompañada mientras comía. Yo comprendía cuando   necesitaba cariño. Cuando comíamos  la solíamos quedar en el pasillo para poder comer tranquilos pues si estaba con nosotros, unas veces se echaba en el suelo  mirándonos pero otras no.  Entonces al terminar la abría la puerta y la decía  vamos al sofá y ella salía corriendo y se sentaba en  el sofá en su rinconcito a los pies antes que yo  llegara. Pero mientras comíamos ella esperaba a la puerta todo el tiempo hasta que abríamos. Todavía después de casi tres meses cuando  me tumbo en el sofá después de comer le dejo el rinconcito donde ella se echaba a dormir siendo  para mí como un ritual.
 4.- Queriendo no me arañaba sino solo jugando y por esos tenía  muchos arañazos por todo el cuerpo e incluso jugando me mordía. Solo  alguna vez que se estresó si me arañó de verdad pero  en muy contadas ocasiones porque la cogía y no quería soltarla  para meterla en casa. Los araños me han curado  pero su ausencia no. Pues la pena por lo que se ve es más profunda y más difícil de curar.
5.-Lo normal en un felino es  no arrimarse a los extraños pero mi Maya quería saber  quién entraba  en casa y se acercaba  a ellos y por eso  mantengo la hipótesis que fue retenida contra su voluntad. Eso la hizo vulnerable pues otros no se dejan  acercar a los demás.
6.--Caminaba junto a mí y alguna vez la reñía porque  no podía caminar pues parecía que se liaba a los tobillos y alguna vez llegué a pisarle el rabiche o una patina. Era su forma de demostrarnos que era parte de nuestra vida.
7.-Aunque son independientes lo pasan mal si se les tiene en espacios  pequeños, como pasó en la guardería o se les deja solo .Por eso cuando estaba sola en casa aunque solo hubiera sido mientras salíamos a comprar al volver siempre estaba esperando a la  puerta. En el pueblo si la dejábamos en casa se subía a   las camas de arriba pero cuando volvíamos ella bajaba corriendo y estaba ahí detrás de la  puerta. Por eso en la guardería  se deprimió y no dejó de llorar aquellos tres días desde el día maldito en que la  llevé incluso cuando la llevaron a Aldeanueva me contó mi hijo que fue llorando todo el trayecto y por eso se escapó pues no quería estar encerrada ni sola y ni siquiera el otro gatito la retuvo allí. RECUERDO UN DÍA QUE  HABÍAMOS IDO DE VACACIONES Y SOLO LA VISITABAN UNA VEZ AL DÍA Y ERA POCO EL TIEMPO QUE PASABAN CON ELLA QUE AL SENTIRME EN EL PASILLO YA CUANDO ABRIERON LA PUERTA SALÍO CORRIENDO HACIA MI Y SE SUBIÓ A MIS BRAZOS PUES ESTABA  FALTA DE CARIÑO. También cuando estaba fuera  preguntaba por ella todos los días y le decía a mi hijo que la visitara  más de una vez al día y que pasara con ella algún rato dándole cariño y mimos y así lo hacía.

8.-La cara de la foto nos indica que estaba feliz, pues tenía los ojos abiertos y redondos o la otra con los ojos cerrados sintiéndose protegida.
Otras páginas  ya las he ido citando.
1.-Se echaba en el sofá junto a mí. Eso demuestra que a pesar de todo lo que digan era un animal social. Y se dormía horas y horas junto a mí buscando el contacto.  En otros momentos se iba a la cuna o al suelo buscando  el poder estirarse o la soledad. Yo siempre respetaba sus acciones. 
2.-Cuando estoy en el sofá,  como se ve en la foto se siente feliz y parece que  está escuchando lo que yo le leo y busca en todo momento que le acaricie  todo su cuerpo desde la cabecita  al lomo pasando por la barriguita.


Otras veces si está en celo se tumbaba en la mesa de cristal y con sus manos alcanzaba las nuestras para que la atusáramos y de forma reiterada y si no lo hacíamos ella insistía en que lo hiciéramos hasta llegar a aburrirnos  pues ella no se cansaba.

3.-Me miraba y me hablaba. Yo solía decir que  al igual que yo le hablaba y ella me entendía, esto sin ninguna duda, ella también me hablaba y muchas veces la entendía. Por ejemplo  muchas veces cuando la echaba la comida en su comedero normalmente limpio tenía que estar con ella pues  por el contrario ella  no comía, ya que quería  estar acompañada mientras comía. Yo comprendía cuando   necesitaba cariño. Cuando comíamos  la solíamos quedar en el pasillo para poder comer tranquilos pues si estaba con nosotros, unas veces se echaba en el suelo  mirándonos pero otras no.  Entonces al terminar la abría la puerta y la decía  vamos al sofá y ella salía corriendo y se sentaba en  el sofá en su rinconcito a los pies antes que yo  llegara. Pero mientras comíamos ella esperaba a la puerta todo el tiempo hasta que abríamos. Todavía después de casi tres meses cuando  me tumbo en el sofá después de comer le dejo el rinconcito donde ella se echaba a dormir siendo  para mí como un ritual.
 4.- Queriendo no me arañaba sino solo jugando y por esos tenía  muchos arañazos por todo el cuerpo e incluso jugando me mordía. Solo  alguna vez que se estresó si me arañó de verdad pero  en muy contadas ocasiones porque la cogía y no quería soltarla  para meterla en casa. Los araños me han curado  pero su ausencia no. Pues la pena por lo que se ve es más profunda y más difícil de curar.
5.-Lo normal en un felino es  no arrimarse a los extraños pero mi Maya quería saber  quién entraba  en casa y se acercaba  a ellos y por eso  mantengo la hipótesis que fue retenida contra su voluntad. Eso la hizo vulnerable pues otros no se dejan  acercar a los demás.
6.--Caminaba junto a mí y alguna vez la reñía porque  no podía caminar pues parecía que se liaba a los tobillos y alguna vez llegué a pisarle el rabiche o una patina. Era su forma de demostrarnos que era parte de nuestra vida.
7.-Aunque son independientes lo pasan mal si se les tiene en espacios  pequeños, como pasó en la guardería o se les deja solo .Por eso cuando estaba sola en casa aunque solo hubiera sido mientras salíamos a comprar al volver siempre estaba esperando a la  puerta. En el pueblo si la dejábamos en casa se subía a   las camas de arriba pero cuando volvíamos ella bajaba corriendo y estaba ahí detrás de la  puerta. Por eso en la guardería  se deprimió y no dejó de llorar aquellos tres días desde el día maldito en que la  llevé incluso cuando la llevaron a Aldeanueva me contó mi hijo que fue llorando todo el trayecto y por eso se escapó pues no quería estar encerrada ni sola y ni siquiera el otro gatito la retuvo allí. RECUERDO UN DÍA QUE  HABÍAMOS IDO DE VACACIONES Y SOLO LA VISITABAN UNA VEZ AL DÍA Y ERA POCO EL TIEMPO QUE PASABAN CON ELLA QUE AL SENTIRME EN EL PASILLO YA CUANDO ABRIERON LA PUERTA SALÍO CORRIENDO HACIA MI Y SE SUBIÓ A MIS BRAZOS PUES ESTABA  FALTA DE CARIÑO. También cuando estaba fuera  preguntaba por ella todos los días y le decía a mi hijo que la visitara  más de una vez al día y que pasara con ella algún rato dándole cariño y mimos y así lo hacía.

8.-La cara de la foto nos indica que estaba feliz, pues tenía los ojos abiertos y redondos o la otra con los ojos cerrados sintiéndose protegida.

 

 

 

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