Siempre prediqué la paz y nunca la guerra. Al contrario otros solo quieren guerra y conmigo no la habrá. Quizá peque de pacifista y no me avergüenzo de ello. Pero debéis entender que no se puede ir en una procesión de Semana Santa y susurrar a las espaldas insultos e improperios, aunque si a Jesucristo que era Dios le crucificaron (estamos en Semana Santa) a su hermanos los hombre también. No se puede decir una cosa con el corazón y otra con una lengua viperina.No voy a entrar en polémicas. Y solo pido tiempo para hacer lo que hay que hacer .Nadie en su sano juicio debe insultar y amenazar por algo que no ha sucedido. Tened paciencia.
Me gustaría que vierais dormir a mi gata Maya, en paz y sin molestarme en nada mientras trabajo.
Si los politiquillos quieren guerra no les apoyéis ni un solo segundo pues los acuerdos no se consiguen con armas sino con la palabra y con trabajo.
Siempre dije y lo sigo diciendo que mis paisanos son trabajadores auténticos e incluso dije y de esto son testigos nuestros convecinos los de otros pueblos que también las mujeres de nuestro pueblo lo son y lo he proclamado por el mundo entero. .
Dejadme trabajar y que solo tenga en mi vida, hacerlo lo mejor posible.
Un saludo.
Mañana nos vemos en Baño de Montemayor
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